¿Por qué se rajan las paredes de una casa nueva?

Si acabas de estrenar tu casa nueva y ya has notado algunas grietas en las paredes, no te preocupes, ¡es más común de lo que piensas! Las paredes pueden rajarse por diversas razones y es importante entenderlas para poder prevenirlas y solucionarlas. En este artículo te explicaremos las causas más comunes de las grietas en las paredes de una casa nueva y cómo evitar que aparezcan. ¡Toma nota!
¿Por qué se rajan las paredes de mi casa?
Si te has dado cuenta de que las paredes de tu casa nueva se están rajando, es normal que te preocupe. Pero no te alarmes, ¡esto es bastante común! A continuación, te explicamos algunas de las razones más comunes por las que se rajan las paredes de una casa nueva:
Fisuras por el asentamiento natural de la casa
Cuando se construye una casa nueva, es normal que esta se asiente en su lugar durante los primeros años. Este asentamiento puede causar pequeñas fisuras en las paredes y techos de la casa, especialmente en las esquinas. Estas fisuras suelen ser pequeñas, verticales y no necesariamente indican un problema estructural en la casa.
Mala calidad de los materiales
Si las fisuras en las paredes son más grandes o están en lugares inusuales, podría ser que se deban a una mala calidad de los materiales utilizados en la construcción de la casa. Si este es el caso, es importante que consultes con un profesional para determinar la gravedad del problema y buscar una solución adecuada.
Problemas en la cimentación
Si las fisuras en las paredes son horizontales y están cerca del suelo, podría ser que haya un problema en la cimentación de la casa. Esto puede deberse a un terreno inestable o a una cimentación inadecuada, entre otras causas. Es importante que consultes con un profesional para determinar la gravedad del problema y buscar una solución adecuada.
Temperaturas extremas
Las fisuras en las paredes también pueden ser causadas por cambios bruscos de temperatura. Cuando la temperatura exterior cambia rápidamente, las paredes pueden expandirse y contraerse, lo que puede provocar fisuras. Este problema suele ser más común en casas que están expuestas a temperaturas extremas, como en zonas desérticas o de montaña.
Humedad
La humedad también puede ser otra causa de fisuras en las paredes. Cuando las paredes se humedecen, pueden expandirse y contraerse, lo que puede provocar fisuras. Esto suele ser más común en zonas con alta humedad o en casas que no tienen una ventilación adecuada.
Si las fisuras son pequeñas y verticales, probablemente no se deban a un problema estructural grave. Sin embargo, si las fisuras son grandes o horizontales, es importante que consultes con un profesional para determinar la gravedad del problema y buscar una solución adecuada.
Cómo arreglar una pared rajada: Consejos de un profesional
Las paredes rajadas pueden ser un problema bastante común en las casas nuevas. A veces, incluso se pueden formar grietas en las paredes de casas más antiguas. Pero no te preocupes, porque en este artículo te daré consejos de un profesional para arreglar una pared rajada.
1. Identifica la causa de la rajadura
Antes de arreglar una pared rajada, es importante que identifiques la causa de la rajadura. Algunas causas comunes incluyen el asentamiento de la casa, la humedad o problemas estructurales. Si no abordas la causa subyacente, es probable que la rajadura vuelva a aparecer después de haberla arreglado.
2. Prepara la superficie
Una vez que hayas identificado la causa de la rajadura, es hora de preparar la superficie para arreglarla. Utiliza una espátula para raspar cualquier pintura suelta o material de relleno en la rajadura. Luego, lava la zona con agua y jabón para quitar cualquier suciedad o grasa.
3. Usa masilla para rellenar la rajadura
Una vez que la zona esté seca, utiliza una masilla para rellenar la rajadura. Asegúrate de utilizar una masilla que se expanda y contraiga con la casa para evitar que la rajadura vuelva a aparecer. Aplica la masilla en capas delgadas y espera a que cada capa se seque antes de aplicar la siguiente.
4. Lija y pinta la pared
Una vez que la masilla se haya secado, utiliza papel de lija para alisar la superficie y hacerla uniforme. Luego, aplica una capa de pintura en la zona para que quede uniforme con el resto de la pared.
¡Espero que os haya servido para entender mejor esos craquelados en vuestras paredes! Si necesitáis echar mano de una experta en diseño y decoración para arreglarlos, ya sabéis dónde encontrarme. ¡Gracias por leer! ¡Un abrazo y nos leemos pronto!
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